¿Te asustan las grietas en los pezones? Para una embarazada el tiempo de espera de su bebé debe ser de alegría y emoción y no para preocuparse por si el proceso de lactancia será doloroso o si su pecho se llenará de grietas. Con este post queremos desmentir el mito de las grietas o la necesidad de que los pezones hagan una callosidad para llevar a cabo el proceso de alimentar al pequeño. La verdad es que la lactancia no debe ser dolorosa y mucho menos traumática para la madre.
Esas pequeñas heridas que aparecen en el pezón se pueden prevenir practicando la posición correcta al amamantar. Eso es lo único que va a garantizar que puedas alimentar a tu pequeño sin dolor ni heridas. Evita caer en las falsas creencias de limitar las horas de alimentación, las grietas no aparecen por uso.
¿Cómo emplear la postura correcta para lactancia y prevenir las grietas en los pezones? Una gran forma de aprender es acudir a grupos de lactancia donde te formarán para dar pecho. Por nuestra parte, te explicaremos cuál es la postura correcta y cómo evitar un mal agarre del pezón.
Evita los vómitos durante el embarazo
Recomendaciones para prevenir las grietas en los pezones
1 Olvida los ungüentos y la vaselina
Usualmente vemos en el mercado diferentes ungüentos que prometen preparar el pezón, pero lo cierto es que la naturaleza en sabia y ya los creó con el diseño perfecto para una lactancia sin dolor. La vaselina tampoco ayudará, en todo caso solo sirve para predisponer a la madre y hacerla pensar que amamantar será difícil, cuando puede ser todo lo contrario.
2 Consulta con un especialista en lactancia
Antes de salir del hospital, comprueba con el pediatra o un especialista en lactancia si la postura que estás utilizando para alimentar a tu bebé es la adecuada. Así, desde el comienzo podrás evitar errores que ocasionen un consumo deficiente de leche, un mal vaciado del pecho, dolor a la succión y las tan temibles grietas en los pezones.
Pasos para una postura de correcta al amamantar
1 La cabeza, cuello y columna del bebé deben estar alineados, nunca torcidos.
2 El mentón siempre debe mirar hacia arriba. Es muy importante que te ubiques en una posición cómoda y relajada. Recuerda que es una etapa muy importante para tu bebe y para ti, debe ser placentera.
3 Usa almohadas o cojines para apoyarte o sostener a tu recién nacido.
4 Pasa suavemente tu pezón por encima de su labio superior para que abra la boca, logra así que su boquita esté bien abierta, será mucho más fácil amamantar.
5 Introduce el pezón solo cuando el bebé haya abierto bien su boca y su lengua esté por encima de la encía inferior, ten paciencia ellos actuarán de forma innata.
6 Mantén el pezón apuntando hacia arriba en la boca del pequeño; mientras su mentón debe tocar el pecho. Lo recomendable es que el bebé cubra con su boca la mayor parte inferior de la aureola, pero depende del tamaño de la misma.
7 Permanece atenta a las succiones del bebé, al principio serán más cortas y luego más lentas y profundas. Si el agarre es correcto no sentirás dolor, solo un pequeño tirón. Tampoco aparecerán las grietas en los pezones.
8 Mucha paciencia. Es un proceso de aprendizaje para ambos, si no lo hace bien a la primera, introduce con cuidado tu dedo limpio por un extremo de su boca para interrumpir la succión y vuelve a intentarlo.
9 Todos los pechos son diferentes, así que no existe el tamaño perfecto o el diseño ideal, lo importante es verificar que la toma sea adecuada a tu cuerpo y bebé. Está bien si no puedes seguir todos los pasos al pie de la letra, pero siempre intenta que el mentón esté hacia arriba tocando tu pecho.
Esperamos que estos pasos te guíen y apoyen en el proceso, te invitamos a disfrutar mucho esta etapa. Déjanos tu comentario si tienes alguna duda.