
5 ciudades que visitar este verano en Europa
Viajar es un placer, y si nuestro destino es Europa y tiene carácter cultural, todavía más. Desde Madaísh, tu red social de moda, belleza y lifestyle te proponemos 5 ciudades mágicas de este continente que debes visitar. ¡Toma nota y elige ya tu destino!
Antes de viajar, prepara tu maleta, decide tus looks y estilismos, lleva tus productos más prácticos de belleza y haz como una fashionista más, ¡disfruta como nadie de tus vacaciones!
-Múnich no es solo el paraíso de la cerveza, su arquitectura es admirable y muestra una perfecta combinación entre modernidad y tradición.
Los lugares que no debes perderte son el Marienplatz, el centro y alma de la ciudad, y el Viktualienmarkt, que es el mercado de alimentos y flores más conocido de Munich. Si te gustan los coches, no dejes de visitar el BMW Welt, un impresionante concesionario con una amplia exposición de vehículos de todas las épocas.
Y a 130 km de Múnich está situado el Castillo de Neuschwanstein, una increíble construcción de ensueño que data del 1869, y que inspiró a Walt Disney para la creación del de La Bella Durmiente. Construido en una época en la que castillos y fortalezas ya no eran necesarios, Luis II de Baviera lo encargó con el fin de crear un espacio poético y mágico en el que poder refugiarse, rodeado por un majestuoso paisaje con el que soñar. De sus paredes cuelgan pinturas inspiradas en las óperas de Wagner, a quien el rey admiraba profundamente.
-Budapest es la perla del Danubio. Enormes puentes unen las orillas de una ciudad antiguamente dividida en tres: Óbuda, “antigua Buda”; Buda, antigua sede real y zona residencial; y Pest, corazón comercial y financiero de la city.
Es una ciudad repleta de monumentos y lugares para visitar; entre los que más definen la ciudad están el Parlamento, el Castillo de Buda y el Puente de la Cadenas. Pero no debes dejar de visitar otros muy curiosos, como el Laberinto del Castillo de Buda con sus cuevas, sótanos y celdas que se extienden a lo largo de más de 1 km, el Aquincum, una importante ciudad romana que fue desenterrada a finales del siglo XIX, y los conocidos balnearios, como el Gellert, así que ten preparado tu bañador y toalla, ¡el agua termal es oro líquido para tu piel, fashionista!
-Ámsterdam sin embargo no es una ciudad de grandes monumentos, pero vale la pena pasear en bici por sus encantadores canales y puentes, y dejarse caer por la zona del Leidseplein, repleta de bares, restaurantes y teatros, o la inevitable visita curiosa al Barrio Rojo. Está a la vanguardia en cuanto a espectáculos y arte. No debes dejar de visitar el Museo Van Gogh, el Rijksmuseum o la Casa de Ana Frank. Y si eres un amante de la naturaleza, no te pierdas el conocido Mercado de las Flores y el Hortus Botanicus, uno de los jardines botánicos más antiguos de Europa. ¡Sus plantas se utilizaron durante siglos para estudios médicos!
-Viena es gastronomía, música, arte y mezcla de culturas. Es una ciudad tan encantadora y fashionista que te hechizará. Entre los lugares más característicos están la majestuosa Ópera de Viena, el Parlamento de Austria, el Palacio Schönbrunn, el Jardín Botánico de Schönbrunn y el parque Stadtpark. Pero no debes dejar de visitar la Casa de Mozart, el Museo de Sissi Emperatriz y el mercado más antiguo de Viena, el conocido Naschmarkt. Y nada mejor que terminar la tarde en el maravilloso Hotel Soher, y saborear una torta imperial acompañada de un delicioso café vienés.
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